sábado, 30 de diciembre de 2023

CARLOS SHOWING, UNA VIDA DE SERVICIO A HUÁNUCO

 CARLOS SHOWING, UNA VIDA DE SERVICIO A HUÁNUCO


Bien podría considerarse el “personaje de los siglos de Huánuco”. Pues, don Carlos Showing Ferrari nace a finales del Siglo XIX, un 30 de diciembre de 1893 y deja su presencia física en la tierra que le vio nacer, el 07 de junio de 1996, finales del Siglo XX. Sobrepaso en vida el centenario de su nacimiento, 102 años de peregrinaje, cuyo influjo aun irradia a las generaciones de este Siglo XXI.

Hombre con acrisolada vocación de servicio. Inicio sus estudios primarios en el Centro Escolar N° 401, hoy Institución Educativa N° 32011 “Hermilio Valdizán” de Huánuco, luego se traslada a Lima a seguir estudios secundarios en la Gran Unidad Escolar “Nuestra Señora de Guadalupe”, donde obtiene el 1er. Puesto en aprovechamiento y es premiado con la “Medalla de Oro” por el presidente de la República Augusto B. Leguía. Estudia la carrera profesional de Medicina Humana en la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, graduándose en 1922.

Retorna a su tierra natal a ejercer su carrera profesional, iniciando en Ambo una vida prolija al servicio del pueblo. Reconocido por “tirios y troyanos” por su labor social y con altruismo sin par, la colectividad huanuqueña lo ha proclamado como “El Medico de los Pobres”. Siempre ejerció su profesión en su terruño, sólo interrumpido por los vaivenes de la política, en momentos de representación en el parlamento y sus deportaciones, y cuando realizó estudios de especialización en la Universidad “La Sorbona” de Francia, en los años de 1927 a 1929.  Interesando en agrupar a sus colegas, fundó y dirigió la Sociedad Médica “Hermilio Valdizán” de Huánuco.

Incursionó en el quehacer político desde los claustros universitarios. Es elegido en 1919 delegado de su facultad al 1er. Congreso Nacional de Estudiantes, llevado a cabo en Cuzco del 11 al 20 de marzo de 1920, donde participan Raúl Porras Barrenechea, Eleazar Guzmán Barrón, Jorge Basadre, Víctor Raúl Haya de la Torre, Pedro Weiss entre otros, y es donde se sientan las bases de la reforma universitaria. Es fundador del Partido Aprista en Huánuco, saliendo elegido como su representante en el Proceso Electoral de 1931, Proceso Electoral de 1945, Proceso Electoral de 1962 y Proceso Electoral de 1963. En los procesos electorales que participó siempre ganó y con alto respaldo de sus conciudadanos, pero lamentablemente no los concluyeron por los intrincados tiempos de la política; anduvo entre destierros y persecuciones.

En el Proceso Electoral de 1931 para el Congreso Constituyente, su partido ocupa el 1er. lugar, con el 45.9% (2,438) de los votos, saliendo elegidos Alfredo Baluarte, Miguel Cuculiza y Carlos Showing.  En el Proceso Electoral de 1945, también ocupa el 1er. lugar con el 58.5% (6,335) de los votos, saliendo elegido como senador Carlos Showing y diputado Miguel de la Mata. Asimismo, en el Proceso Electoral de 1962 su partido gana el 1er. lugar de las preferencias con el 41.5% (13,311) de los votos, saliendo elegido senadores Carlos Showing y Luis Rivera Tamayo, diputados Nicéforo Espinoza, Mario Rivera Céspedes, Zomeli Trujillo, Joffre Fernández y Miguel de la Mata; en el Proceso Electoral de 1963, igual su partido logra el 1er. lugar, aún con mayor votación, el 46.7% (15,020) de los votos, saliendo elegido senador Carlos Showing y diputados Nicéforo Espinoza, Zómeli Trujillo y Miguel de la Mata.

Protagonista en todo acontecimiento de significancia. Como su elección en asamblea del 14 de octubre de 1960 como presidente del Comité Central Pro universidad de Huánuco, que daría origen a la hoy Universidad Nacional Hermilio Valdizán o estando en el último año de estudio en la Universidad Mayor de San Marcos, es seleccionado para integrar la expedición a la selva central con el científico Erland Nordenskiold.

Una vida sin tregua a favor de Huánuco redondearía bien esta pequeña semblanza.

Por: Isaac Laurencio Boza

Publicado en semanario Avance de Huánuco

jueves, 7 de diciembre de 2023

ADALBERTO VARALLANOS

ADALBERTO VARALLANOS, DEL LEGENDARIO VALLE DEL ÑUCÓN DE JESÚS

Irrumpió a la escena nacional con esa generación luminosa de pensadores del Siglo XX, que dejaron huellas indelebles en los diversos campos del quehacer cultural y social de nuestra patria. Pero el destello intelectual de Adalberto Varallanos partió pronto, verdad que es inimaginable los límites de su proyección. Pues se truncó una gran esperanza, mas ya era una realidad, tal como lo retratará su coetáneo y amigo Jorge Basadre, había en él dice: “devoción absoluta a la literatura”.

Cuentista, crítico literario, prosador de polendas, poeta y ensayista, escritor surrealista, jesusino; editorialista. En 1924 edita el libro “Ideario de Acción” del pensador mexicano José Vasconcelos; así como, la revista CELULOIDE, de arte cinematográfico. Con Manuel Beltroy, animador de empresas librescas, funda la editorial y librería “Renovación”. Asimismo, en 1927 con Jorge Basadre, Xavier Abril, Carlos Oquendo de Amat y otros, funda “La Jarana”, revista de literatura y arte.

Hay que ir a la geografía del amauta Javier Pulgar Vidal y su enfoque, para quizá comprender y definir mejor sobre el lugar de su nacimiento. Tan igual que en la geografía al describir las regiones del Perú, “digamos, que el facilismo al estilo español, han hecho y hacen, que mantengamos aún, repitamos, designamos a Huánuco como el lugar de su nacimiento”. Adalberto Varallanos nació en la ciudad de Jesús, capital de la hoy provincia de Lauricocha, un 23 de abril de 1903, hijo de don Andrés Vara Cadillo y doña María Nicolasa Llanos Vargas. Fallece en Jauja a los 26 años de edad, el 29 de julio de 1929.

Con el alma impregnado de un nuevo espíritu, reclamaba que “Huánuco no debe seguir viviendo o jactándose de títulos nobiliarios que recibió de los dominadores españoles”; había en él un afán renovador, inspirador, futurista. El año 1922 ingresa a la Universidad Nacional Mayor de San Marcos a estudiar en la facultad de letras, también fue alumno de jurisprudencia; en Huánuco estudio la primaria en el Colegio Seminario San Luis Gonzaga, y secundaria en el Colegio Nacional de Minería (1917-1921), hoy Colegio Nacional Leoncio Prado de Huánuco.

Como las letras del poema de Nicanor de la Fuente en su honor “se ha ido en raid de eternidad y silencio”. Sus obras quedaron dispersas en diversas revistas, que no han perdido vigencia y hoy vuelven a la valoración de la crítica en festivales y seminarios. Gracias a su hermano José Varallanos se han publicado: “La muerte a los 21 años y otros cuentos” (1939), “Receptáculo de Términos” (1939), “Datos para la Critica del mañana” (1936). En “Permanencia” (1968), su hermano José recopila toda su producción edita.

Iniciador de la prosa surrealista en el Perú, uno de los primeros sudamericanos en llegar a publicar en revistas europeas. Colaboró en “Amauta”, “La Sierra”, “Mundial”, “La Crónica”, la revista de “Lima”, en Perú; Revista “Avance” de La Habana (Cuba); “Orientación” en Buenos Aires, el “Mentor”, “San Juan de Areco”, en Argentina; “Transitión”, en París (Francia) y EEUU. No cabe duda que fue un escritor de porvenir y un acucioso investigador, refieren “que no habría de faltarle, era el primero en conseguirse, siempre en la mano, la más reciente publicación del extranjero”.

Con afán renovador, espíritu revolucionario, vanguardista, retorna a Huánuco (1924) con su amigo Esteban Pavletich promoviendo actividades culturales, que digamos no bien acogida en su tiempo. A Pavletich le escribe desde su lecho de dolor una carta premonitoria que reza “Si alguien te pregunta por mí dile que me he muerto por un año”. Pues que mejor, terminar y retratar su vida con las estrofas de un escrito de Jorge Basadre: “La independencia que el arte nuevo proclamaba, él la llevo a su vida. En sus años en Lima vivió con el mismo descuido para la comida y el sueño que el de los poetas de entonces para la rima y el metro. Probablemente actuaron también otras circunstancias. Cuando la enfermedad había tomado ventaja partió a la sierra, a Jauja. Allí vio venir la muerte”.

Por: Isaac Laurencio Boza  

Publicado en semanario “Avance”.